lunes, 10 de febrero de 2014

La noche de la luna negra, de Sherrilyn Kenyon

Hacía mucho tiempo que no reseñaba un libro de mi adorada saga de los Cazadores Oscuros, pero como fui leyendo sin pararme a dar opinión a partir del séptimo volumen, Disfruta de la noche, no sabía muy bien cómo retomar el hilo. 

Algún día caerán reseñas de todos, al menos eso espero, tiempo al tiempo, pero por lo pronto, me gustaría continuar a partir de este volumen que es, ni más ni menos, el 18º. El porqué de que haya elegido éste en particular lo comentaré más abajo =)

Argumento

Fang Kattalakis no es un lobo cualquiera; es el hermano de dos de los miembros más poderosos del Omegrion, el consejo presidido por Savitar que dicta las leyes de los Arcadios y Katagarios. Mientras Vane y Fury pasaban por sus propias encrucijadas antes de llegar a ocupar esos puestos, Fang estaba en un estado comatoso del que no parecía querer despertar tras la muerte de su hermana Anya. Pero ¿y si no fuese así? ¿y si lo que se veía desde fuera no correspondía a la auténtica situación del lobo? 

Sólo Aimée Peltier, del clan de los osos que regentan el conocido restaurante y refugio para todas las especies, el Santuario, descubre la verdad y es la única capaz de salvarle del infierno en que está encerrado.

La relación entre ambos está prohibida pues pertenecen a especies diferentes y, para complicarlo aún más, la continuación del linaje entre los osos se realiza desde las hembras, y Aimée es la única hija que tienen los Peltier. Por esa razón está sobreprotegida por todos sus familiares, especialmente su madre, Nicolette, y su hermano, Dev. Además Aimée guarda un secreto que no ha dicho a nadie en su familia y es que, como varios de sus hermanos, en la pubertad se convirtió en Arcadia, y no en una cualquiera, sino en una con un inmenso poder. Es por ello que siempre ha temido emparejarse con cualquier oso Katagario presentado por su madre.

Aunque ambos adoren a sus respectivos familiares, la pasión que hay entre ellos es imposible de ignorar y llegará el momento en que deberán elegir quiénes son los más importantes en sus vidas.

Reseña

El resumen lo he escrito yo misma, evitando spoilers, porque lo que viene en la contraportada no tiene nada que ver con lo que uno se encuentra dentro de las páginas. Cualquiera que se lea la novela y luego mire lo que han escrito detrás se dará cuenta de ello. En fin...

Tras ver quiénes son los protagonistas de esta novela, posiblemente entendáis por qué he elegido ésta para volver a reseñar la saga. Nos encontramos con un libro que ata acontecimientos que se empezaron a dar hacia el principio de la saga, desde el tercero, El abrazo de la noche, ahí es nada. No sólo eso sino que enlaza con un buen número de libros que siguen a éste. Por ejemplo, nos reencontramos con un Valerio estirado antes de los acontecimientos de Disfruta de la noche (7º libro). Pero sobre todo, las historias más relevantes con las que se cruza son la de Vane en El juego de la noche (6º libro) y la de Wren en Desnuda la noche (9º libro, no reseñado a fecha de hoy). También resulta un tanto spoiler para la historia de Fury, que aquí no ha llegado a salir publicada y ya sabemos quién es su pareja y un poco cómo empezó todo entre ellos.

La gran baza de este libro es generar una historia prácticamente nueva, añadiendo incluso nuevas especies y personajes que, seguro, serán muy destacados en futuros libros, y todo eso manteniendo el hilo de acontecimientos que ya se habían producido con anterioridad. La forma en que Kenyon consigue que todo el puzzle vaya encajando es soberbia. Eso sí, incluso para quienes nos hemos leído todos los libros salidos hasta la fecha, alguno de ellos más de una vez, nos empieza a costar seguirle el ritmo con todo lo que está generando en esta saga.

La trama comienza desde el día en que se conocen los dos protagonistas, con una atracción mutua inmediata, y tienen sus primeros encontronazos y peleas, por lo que no será únicamente la pasión lo que surja entre ambos. No obstante, lo más relevante al poco de comenzar la novela es que, a pesar de saber más o menos lo que pasó en la muerte de Anya, es en esta novela donde Kenyon nos cuenta todo lo trágico que se produjo esa noche. Y es a partir de ahí donde comienza la auténtica aventura de Fang y Aimée.

Algo que ha tenido mucha importancia en esta novela es el dilema de ambos, especialmente de ella, entre la elección de amor o familia. Cuando se presentan tantos problemas y tantas variables a considerar no es una decisión fácil y resultan creíbles las decisiones que van tomando respecto a este tema, haciendo una historia desgarradora más de una vez.

Una pega que le pongo a la novela, a pesar de que me ha encantado, es que el romance entre Fang y Aimée no me ha cautivado como en otros de los volúmenes de la saga. Le pasa un poco lo mismo que a La Hermandad de la Daga Negra, la historia se ha ido complejizando tanto que el espacio que tienen los protagonistas de cada novela para desarrollar su relación no es el que antes poseían otras parejas. En ésta en particular, con todo lo que la autora tenía que atar, me ha parecido especialmente relegado a un segundo plano. Aunque no discuto que tienen algunas escenas preciosas.

No obstante, no resulta muy relevante esa pega cuando tenemos un elenco cada vez más amplio de personajes geniales. No sólo los mismos protagonistas son estupendos por su carácter fuerte y su lengua mordaz e irónica, sino porque se enfrentan a lo que sea por aquellos a los que quieren. Entre las incorporaciones más interesantes que nos ha presentado Kenyon aquí se encuentran Thorn y Varyk de los que esperamos saber más cosas próximamente. Por el contrario, el que baja mi opinión sobre él es Vane, que ya me defraudó un poco en su propio libro y aquí pierde aún algunos puntos más con su actitud tras el "coma" de Fang. Por suerte, al final, con la decisión que estaba dispuesto a tomar, recupera algunos puestos aunque está claro que queda muy lejos de cualquier TOP que quisiera hacer de protagonistas de esta saga.

Poco más que añadir. Aunque tiene sus cositas, a fecha de hoy sólo recuerdo que haya un libro que no me haya gustado (aún no está reseñado) y La noche de la Luna Negra no pasa a hacerle compañía. Vuelvo a recomendar esta saga a cualquiera que busque romance mezclado con acción, mitología, algo de drama y también humor. Personajes maravillosos, una pluma directa pero rica que impide que uno se despegue de las páginas del libro, y un mundo amplio del que todavía queda mucho por saber. Que no os asuste el número de libros, no os daréis cuenta y ya los habréis leído todos y estaréis deseando que salga el próximo.

4 comentarios:

  1. La verdad es que esta autora es un acierto seguro cuando quieres leer un libro entretenido y rápido de leer, pero en ocasiones se quedan cortos. Buenas reseña!

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    1. Sí! Estoy deseando que salga en siguiente en bolsillo *O*

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  2. Me encantaría retomar esta saga pero es eterna xD y lo malo es eso, que aunque son más o menos historias independientes, si no lo haces cronológicamente, pierde la esencia al no conocer al completo a los personajes...

    ¡Besos!

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    1. Retómala! Que merece mucho la pena y cada vez la lía más! XD (aunque echo un poco de menos los primeros libros más románticos)

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